Fue declarado en 1992 por las Naciones Unidas, el 22 de marzo como Día Mundial del Agua. El objetivo es captar la atención global de todo el planeta sobre la importancia del agua y promover acciones que mejoren la gestión sostenible de nuestros recursos hídricos. El Día Mundial del Agua 2014 gira en torno a la relación entre el agua y la energía, dos elementos fundamentales en la vida diaria que se relacionan entre sí.
El agua es necesaria para producir casi todas las formas de energía. Derrochar agua es derrochar energía, y ambas son básicas en el desarrollo económico y para luchar contra la pobreza. Existen muchas desigualdades que afectan a millones de personas, en países conflictivos, barrios marginales de grandes ciudades o en zonas rurales empobrecidas. Mientras en muchos lugares derrochamos el agua y la energía, millones de personas no tienen acceso a agua potable. Por ello se celebra el Día Mundial del Agua para concienciar sobre este tipo de problemas.