Por Ramón Rodríguez Rangel
Se extingue el parque natural del estero de Tenechaco en Tuxpan, por el asolvamiento del estero, en donde la tierra utilizada en la construcción de los últimos puentes, ha cerrado el paso al flujo y reflujo del agua, por lo que esta permanece estancada, generando inclusive olores fétidos.
El incumplimiento de la promesa oficial de sanear el estero desviando las aguas negras de los drenajes sanitarios de la ciudad hacia plantas tratadoras de aguas negras, ha propiciado la descomposición de este brazo del río Tuxpan.
En la parte terrestre la deforestación ha mermado el cuerpo forestal que acompaña el estero, acabándose con manglares y otras plantaciones que han contribuido a que el parque del estero de Tenechaco haya sido considerado como uno de los principales pulmones de la ciudad, que esta extinguiéndose al crecimiento de la mancha urbana.
Las autoridades en lugar de buscar mecanismos jurídicos para la protección de la flora, la fauna terrestre y fluvial, están permitiendo nuevos asentamientos humanos en áreas que debieran ser consideradas como reserva ecológica de Tuxpan.
Editorial
