Por Hipólito Cuevas Martínez/Crónica del poder
Por su férrea oposición gubernamental, Miguel Ángel Yunes Linares será el actor político estelar y mediático en los comicios para la elección de diputados federales que culminará en el mes de julio del presente año. Desde el 2004 el ex candidato panista al gobierno ha representado un fuerte dolor de cabeza para los gobernadores priistas del Estado de Veracruz.
El de Soledad de Doblado es un tipo de carácter fuerte; jamás rehúye a las confrontaciones políticas y es directo y contundente en sus críticas, no se anda con rodeos ni contemplaciones de ninguna especia.
Cuenta en su haber con una enorme experiencia en cargos públicos desempeñados tanto en la administración pública estatal como federal; ha sido dos veces diputado federal y una ante el Congreso Estatal. Fue poderoso Secretario de gobierno y dirigente estatal del PRI en el sexenio de Patricio Chirinos Calero, aunque inició su carrera política en el gobernador Rafael Hernández Ochoa como presidente del Tribunal Fiscal
Y ahora, colocado ya en la posición número uno en la lista de la tercera circunscripción de los candidatos a diputados federales de Representación Proporcional (plurinominales), El de Soledad de Doblado habrá de darle mayor vigor y dinamismo a sus acciones de supervisión y vigilancia en torno al buen manejo y transparencia de los recursos financieros de la entidad, así como de la administración público estatal.
Se dice que la rivalidad política que existe entre Fidel Herrera y Miguel Ängel Yunes Linares, según los enterados, se produjo cuando ambos políticos trabajaban en la SEDUE con Patricio Chirinos y se señala al expresidente Salinas como artífice de esa división
No debe olvidarse que Yunes perdió, ante Fidel Herrera Beltrán las elecciones para la renovación de la gubernatura del estado, pero el abanderado por Acción Nacional se levantó con un botín electoral de más de un millón 300 mil votos, en unas elecciones sumamente cuestionadas que incluso tuvieron que resolverse en el Tribunal Federal Electoral.
La copiosa votación obtenida por Yunes Linares, además de que es producto de sus indiscutibles habilidades como estratega y político, le han permitido también que sus hijos escalen posiciones políticas de Importancia, como Fernando, quien , pese a su juventud, es senador de la República y Miguel Ängel, por segunda ocasión alcalde de Boca del Río, le permitirán contar con una sólida plataforma político electoral para volver a competir por la gubernatura del Estado de Veracruz.
Yunes Linares, quien ha tenido responsabilidades públicas de alta jerarquía en la administración pública federal durante los gobiernos panistas de Vicente Fox y Felipe Calderón, ha dicho que “Mi elección como candidato es un reconocimiento a todo el panismo de Veracruz por sus logros y por la batalla que hemos dado durante 10 años contra gobiernos autoritarios y corruptos del PRI, que han hecho un grave daño a Veracruz”.
Pero además, no debe olvidarse que Yunes Linares cuenta inclusive con la simpatía y apoyo de algunos militantes del Partido Revolucionario Institucional, del cual fue militante durante varios años, que estarían dispuestos a rifársela por él, en caso de que se fragüen políticas antidemocráticas en la elección interna del candidato del PRI al gobierno de Veracruz.
Situación difícl pues a la que se enfrentará el gobierno local y la cúpula estatal priista ante los eventos políticos electorales que se avecinan y la unión de los Yunes (todos, se dice) en torno a un proyecto político viable ante la fractura del priismo veracruzano.
EL PILON
Diría alguien por ahí: no se hagan bolas.
Y la verdad es que así debe de ser.
Luego de la ola de rumores y conjeturas que levantó el nombramiento de Enrique Ampudia Mello en la secretaría particular del Gobernador Javier Duarte de Ochoa, hay quienes insisten en señalarlo en que lleva la marca de la casa Yunes.
Sin embargo, para que quede claro el asunto, Ampudia Mello llega a la Particular, así como antes a la Subsecretaría de Gobierno, tras una triangulación política que se dio entre un ex gobernador del Estado de Querétaro (muy amigo del de Nopaltepec), Fidel Herrera Beltrán y el propio Javier Duarte de Ochoa. Así fue la negociación, nos dicen.
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