Por Jeanette Leyva Reus/El Financiero
La extracción de petróleo en aguas profundas del Golfo de México podría ocurrir hasta 2018, esto en el mejor de los escenarios, ya que la época de petróleo de fácil acceso está llegando a su fin, afirmó BBVA Research.
De acuerdo con el análisis realizado por BBVA Research en su reporte «Situación regional», la legislación secundaria de la reforma energética deberá incentivar el desarrollo de proyectos de aguas profundas y en recursos no convencionales (gas shale), que concentran 23.2 y 52.5 por ciento de los recursos prospectivos de hidrocarburos, respectivamente.
Debido a ello, se estima que por lo menos se requieren dos años para finalizar un proyecto de aguas profundas después de haberse firmado los contratos, «en el mejor de los casos, en el escenario más optimista, la producción de petróleo en aguas profundas ocurriría hasta 2018», resaltó el documento.
Carlos Serrano, economista en jefe para México de BBVA Research, explicó que las leyes secundarias serán fundamentales para incrementar la producción de petróleo y disminuir los precios de los energéticos, pero a pesar de ser una reforma importante, «no se deben echar las campanas al vuelo», afirmó.
«La legislación secundaria de la reforma energética deberá incorporar: requisitos de contenido nacional que no causen rezagos en el desarrollo de yacimientos de hidrocarburos de difícil acceso; las condiciones que determinarán hasta dónde se podrá perforar el último pozo ante las progresivamente mayores tasas de declinación de hidrocarburos de lutitas; y una regulación efectiva de la seguridad industrial, la protección ambiental, y del uso, reciclaje y reutilización del agua para el fracking», detalló.
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