18 años de pactos y complicidades con los cárteles de la droga
**Uno con Albino Quintero, el otro con los Zetas, y el último con el Cártel de Jalisco.
**Yunes Linares por más que intente no puede sofocar el desastre que le heredaron.
**Ahora ya no existen las complicidades del pasado y se les combate con toda la fuerza del estado.
**Lucha entre cárteles por el dominio de la plaza provoca una carnicería a los largo y ancho del estado.
Veracruz.- 01/Marzo/2017.- A ver para no hacernos pendejos ni omisos ante lo que pasa actualmente en Veracruz, fueron 3 sexenios, o lo que es lo mismo 18 años, o para ser más exactos 216 meses, en los cuales el estado de Veracruz fue entregado al crimen organizado de forma descarada, 216 meses en los cuales diferentes bandas delictivas pactaron con los gobernadores del PRI en Veracruz para operar a sus anchas en todo el estado de Veracruz sin ser molestados en sus actividades delictivas y de trasiego de drogas.
Ahora cuando una nueva administración estatal llega al poder, la cual apenas lleva en funciones 3 meses, o lo que es lo mismo 91 días, se encuentran con un estado incendiado por la pugna entre aquellos cárteles y grupos delincuenciales que actuaban al amparo del poder, y que ahora se disputan el territorio para el trasiego de drogas, secuestros, extorsiones, robos.
Para ello han emprendido una sangrienta lucha entre ellos mismos por controlar las diferentes «plazas» a lo largo y ancho del estado de Veracruz.
Ahora es diferente, no hay, ni habrá pacto como lo hubo en el pasado, ahora se les está combatiendo desde el primer día de esta nueva administración estatal, fuerzas estatales y federales actuando coordinadas, incluso pidiendo refuerzos al gobierno federal, pero el papel no es nada fácil ni se ve que pronto vaya a mejorar, son 18 años de corrupción y complicidades, 18 años donde se dejó pasar todo tipo de delitos, 18 años en donde se pactó con el poder en turno para tomar como rehén al estado de Veracruz para sus actividades ilícitas, 18 años que no se van a poder erradicar en tan sólo 3 meses del nuevo gobierno estatal, 18 años que están tan enquistados que por más que se luche y se les combata podrá erradicarse en el corto plazo.
Lo ocurrido esta madrugada en Boca del Río, en donde aparecieron 11 cuerpos ejecutados dentro de una camioneta no es más que todo lo arriba descrito, pugnas entre grupos delincuenciales que se pelean la plaza de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, así como lo hacen por toda la geografía veracruzana, aunque cueste y duela decirlo esas 11 personas ejecutadas en Boca del Río eran seres humanos ante todo, pero hablando claro no eran «personas de bien», eran integrantes de una banda delictiva contraria a la de sus ejecutores, esas 11 personas ejecutadas eran igual de despiadados y sanguinarios que los que les privaron de la vida, esas 11 personas ejecutadas son ni más ni menos que la herencia maldita de 18 años de gobierno corruptos y coludidos con la delincuencia organizada, esas 11 personas ejecutadas son ni más ni menos que el resultado de haber entregado el estado al crimen organizado y a las bandas delictivas dedicadas al trasiego y tráfico de drogas, secuestros, levantones, extorsiones, ejecuciones.
Miguel Alemán Velasco pactó en su sexenio con el narcotraficante Albino Quintero Meraz, le entregó el estado a cambio de muchos millones de dólares, lo dejó que moviera miles de toneladas de droga por cielo, mar y tierra de la geografía veracruzana, no fue Alemán quien lo detuvo, fue el gobierno federal, e incluso el capo de la droga vivía a 2 cuadras de la casa del mandatario estatal en el exclusivo fraccionamiento costa de oro en Boca del Río, Veracruz. En aquel entonces su secretario de seguridad pública era Alejandro Montano, hoy flamante candidato del PRI a la alcaldía de Xalapa.
Fidel Herrera Beltrán hizo pactos desde la propia campaña electoral con el grupo delictivo de los «Z» quienes se sabe financiaron dicha campaña con muchos millones de dólares, a cambio Fidel les entregó en bandeja de plata todo el estado para que operaran a sus anchas con la complacencia de las corporaciones de seguridad pública estatal, no es por eso que a Herrera Beltrán se le conocía en su mandato como el «Z1» ya que era el principal operador de dicho grupo delictivo durante su sexenio. Aquella balacera en la congregación de Villarín fue el detonante de todo, altos capos de los «Z» aterrizaron en vuelos privados en el aeropuerto de Veracruz sin que fueran molestados por nadie, se trasladaron vía terrestre a Villarín custodiados por elementos de seguridad pública estatal y ya ahí se armó lo que todos ya sabemos durante una carrera de caballos clandestina, incluso un alto funcionario del gobierno del estado, Gustavo Souza Escamilla (Secretario de Turismo), se encontraba en el lugar junto a los «Z» apostando en dicha carrera, le tocó un balazo en un pie, hoy en día es el flamante candidato del PRI a la alcaldía del Puerto de Veracruz.
Javier Duarte de Ochoa hizo y dejó pasar a los cárteles de la droga igual que su antecesor, nada más que este no pactó con los «Z» herencia de su maestro, y se hizo de acuerdos y pactos con el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), a quienes se les entregó el estado y entraron a limpiarlo de los «Z» lo que ocasionó una masacre a lo largo y ancho de la geografía veracruzana durante todo el sexenio, el CJNG fue el responsable de aquella aparición de 35 cuerpos en Boca del Río en el año 2011, 35 cuerpos que eran producto de la limpia que hacía el CJNG para adjudicarse la plaza de Veracruz ante la complacencia del gobernador en turno con quien habían pactado y al que le habían entregado muchos millones de dólares para poder operar a sus anchas, por eso el secretario de seguridad pública Arturo Bermúdez Zurita, se hacía de la vista gorda y ofrecía protección a dicho grupo delincuencial para operar con total impunidad, hoy en día Bermúdez Zurita se encuentra recluido en un penal de Veracruz, donde se espera pase muchos, pero muchos años internado.
Esta es la historia maldita que tiene asolado a Veracruz al día de hoy, esta fue la forma en como se entregó el estado en los últimos 18 años a la delincuencia organizada, esta es la realidad que se vive hoy en nuestro querido estado, este es el resultado de la violencia que se vive en la geografía veracruzana, este es el resultado de los ajustes de cuentas entre criminales como el que se vivió esta madrugada en la ciudad de Boca del Río, este es el resultado de los pactos y acuerdo de Alemán, Herrera y Duarte con los delincuentes.
Yunes Linares lleva 3 meses, o lo que es lo mismo 91 días en el poder, desde el primer momento ha puesto todo para intentar solucionar este grave problema que enfrenta Veracruz, ha pedido ayuda al Gobierno Federal, ha dado golpes al crimen organizado, pero no comprendan que solucione en 3 meses, o lo que es lo mismo 91 días, toda la mierda que dejaron Alemán, Herrera y Duarte, tras 6 sexenios, o lo que es lo mismo 18 años, o simplemente 216 meses de corrupción y pactos con el crimen organizado.
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