Así ‘nace’ un crucero

35.000 toneladas de acero divididas en 300.000 piezas, 1.500 kilómetros de cables, 200 kilómetros de tuberías y 100 kilómetros de estructura para aire acondicionado y ventilación

Redacción/La Vanguardia

Desde exploradores como Cristobal Colón o Marco Polo a temibles piratas como Mary Read o Barbanegra. El sueño de aventura es intrínseco en el ser humano y el mar ofrece todas las ventajas para que esta sea una experiencia inolvidable. Surcar océanos estaba antes al alcance de unos pocos. Hoy en día, sin embargo, ciudades flotantes en forma de cruceros monstruosos ofrecen a millones de personas la posibilidad de llegar allende los mares, sacrificando el peligro a cambio de lujo, comodidad y barra libre.

Gracias a técnicas innovadoras, ahora podemos ver cómo se construye un descomunal crucero. La empresa MSC Cruceros ha colgado en YouTube la construcción de su barco MSC Meraviglia en un time lapse espectacular. Pieza a pieza, como si de un Lego se tratara, el inmenso crucero va tomando forma hasta que, finalmente, espera sólo la llegada de miles de turistas ansiosos por vestirse de etiqueta para la cena de gala protocolaria con el capitán. Se construyó en astilleros franceses y, a partir de junio de 2017, este barco de nueva generación empezó a navegar por el Mediterráneo.

Las cifras de este barco gigante son simplemente impresionantes: 35.000 toneladas de acero divididas en 300.000 piezas, 1.500 kilómetros de cables, 200 kilómetros de tuberías y 100 kilómetros de estructura para aire acondicionado y ventilación. Todo eso para dar servicio a los 5.714 pasajeros que el Meraviglia podrá llevar en ocupación máxima alojados en 2.244 camarotes, de los que el 75% tiene balcón privado.

Comentarios de Facebook
Comparte en tus redes sociales
Share on Facebook
Facebook
Tweet about this on Twitter
Twitter
Print this page
Print

Acerca de Expreso de Tuxpan

El sitio de noticias líder de Tuxpan, todo lo importante de la política, cultura, mundo, desarrollo, ciencia, tecnología y más.

Ver todas las entradas de Expreso de Tuxpan →