Por Luis Velázquez/Escenarios/Blog Expediente MX
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Se entregó al crimen organizado
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Tres carteles siguen operando en Veracruz
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El descrédito de Javier Duarte, JD, como gobernador de Veracruz resulta inverosímil.
Por ejemplo, el domingo 29 de mayo, Felipe Calderón Hinojosa, el segundo presidente de la república de oposición al PRI, estuvo en Boca del Río en el cierre de Miguel Ángel Yunes Linares como candidato a la silla embrujada de palacio, y acuñó las siguientes frases bíblicas:
Acusó a JD del (presunto) desvío de 3 mil 400 millones de pesos de fondos federales.
De entregar a la policía estatal y municipal para que el crimen organizado con los Zetas, dijo, operara en Veracruz.
Los Zetas, dijo, estuvieron atrás del secuestro de los 5 jóvenes de Playa Vicente levantados en Tierra Blanca.
Y también los malosos participaron en el secuestro de 3 jóvenes en Papantla.
“La autoridad de Veracruz, aseguró, se ha entregado al crimen organizado”.
Incluso, recordó el famoso operativo de “Las maletas voladoras” con 25 millones de pesos, en billetes de 500 y mil pesos, nuevecitos, amarrados con ligas, que Vicente Benítez, entonces jefe máximo en la SEFIPLAN, enviara a través de los suyos en un vuelo especial de Xalapa a Toluca.
Y, bueno, los apologistas del duartismo dirán, por ejemplo, que Felipe Calderón sacó al ejército de los cuarteles y los envió a luchar contra los narcos, con un saldo de 20 mil muertos, muchos de ellos civiles.
Pero con todo, fue presidente de la república, jefe máximo en Los Pinos, el tlatoani y gurú sexenal.
Y por tanto, cuando un ex presidente de la república que ganó la elección en las urnas de manera categórica y rotunda, derrotando por segunda ocasión al candidato priista, truena en contra de un gobernador en funciones como Javier Duarte, caray, con todo y que uno y otro son oposición, la figura expresidencial se impone.
Y, por tanto, el descrédito de JD llega a su más alta dimensión.
Y más por lo siguiente.
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El ex presidente de la república dijo en Boca del Río lo que aquí, en la aldea, ha trascendido, pero que ni el duartismo ni tampoco algún actor social, político o económico ha expresado con toda libertad, como es que los Zetas estuvieron atrás del secuestro, desaparición y asesinato de los 5 jóvenes originarios de Playa Vicente levantados en Tierra Blanca por elementos policiacos del secretario Arturo Bermúdez Zurita y entregados a los narcos.
Y aun cuando el Fiscal tiene en la cárcel a 8 policías acusados de desaparición forzada hasta anoche el proceso penal sigue su tiempo y ritmo, sin que nadie, al momento, haya dictaminado que los Zetas estuvieron atrás del operativo.
Es decir, que los narco/policías se los entregaron a los Zetas, así, con los puntos en la íes, sin rodeos ni medias tintas.
Y, por tanto, ha sido el ex presidente de la república quien en el cierre de campaña de Yunes Linares ha embestido “el toro por los cuernos”, él, que desde Los Pinos conocía el escenario nacional y envió al ejército y a los marinos a tal batalla singular.
Y más por lo siguiente:
Felipe Calderón gobernó el país hasta el mes de noviembre del año 2012, cuando Javier Duarte, JD, ya llevaba dos años de gobernador.
Y, por tanto, conocía el estilo personal de gobernar y ejercer el poder de JD, pues para entonces, y solo como referencia nueve reporteros y fotógrafos habían sido asesinados en Veracruz, a saber, Noel López Olguín, Miguel Ángel López Velasco, Misael López Solana, Yolanda Ordaz, Regina Martínez, Gabriel Huge, Guillermo Luna, Esteban Rodríguez y Victor Báez.
Además de dos reporteros desaparecidos, Gabriel Manuel Fonseca y Sergio Landa Rosado.
“La autoridad de Veracruz, dijo Felipe Calderón, se ha entregado al crimen organizado”
¡Vaya verdad infernal y terrorífica! ¡Vaya descrédito de JD! ¡Vaya evidencia tan canija para JD y Arturo Bermúdez!
Y más porque lo dijo un ex presidente de la república ante unos 40 mil panistas y simpatizantes del Yunes rojo concentrados en el malecón de Boca del Río.
El pobrecito y ridículo vocero duartista quiso revirar a Felipe Calderón a través de su cuenta de Twitter.
¡Pena de la pena ajena!, como si en su Twitter, además, tuviera millones de seguidores.
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El descrédito de JD alcanza su peor descarrilamiento a partir de la denuncia de la PGR, Procuraduría de Justicia de la nación, y de la DEA, agencia antinarcóticos de Estados Unidos, en el sentido de que en el Veracruz del año 2016, último año del llamado sexenio próspero, operan los siguientes carteles.
A, los Zetas. B, Jalisco Nueva Generación. Y C, Del Golfo.
Y aun cuando los expertos aseguran que los carteles están fragmentados y por tanto hay cartelitos, además de los delincuentes del orden común, rateros y ladrones de autos, asaltabancos, asalta/casas, etcétera, la inseguridad está convertido en el pendiente social número uno en la tierra jarocha.
Simple y llanamente, JD, ni tampoco Arturo Bermúdez, nunca pudieron, nunca les interesó y/o en todo caso, dejaron hacer y dejaron pasar, pues como dice Felipe Calderón, estaban coludidos con los malandros.
Editorial
