Por Maryjose Gamboa/Al aire…
Ni paciencia, ni prudencia, y menos verbal contingencia cuándo lo que impera es la demencia y el desesperado aullido de clemencia… Esa es la conclusión de la “cartita” enviada por el lamentablemente más “famoso” interno del Reclusorio Norte, Javier Duarte, defendiendo al eterno “pre” candidato morenista a la presidencia de la república.
El 4 de julio del 2017, el desquiciado megalómano que des gobernó Veracruz por seis años declaró al término de la audiencia en la que se resolvería su extradición de una cárcel en Guatemala a una en México, lo siguiente: “Paciencia, prudencia, verbal contingencia, dominio de ciencia, presencia o ausencia, según conveniencia”.
Dicha declaración -mal parafraseada además porque la original dice “verbal continencia” que NO es lo mismo que “verbal contingencia”- no sorprendió a nadie por más “rebuscada” que pareciera, por dos simples razones; la primera porque en medio de su “demencia” sigue teniendo la “lucidez” de intentar defenderse, y la segunda y probablemente más importante, porque la frase llevaba un mensaje implícito bastante fácil de comprender, no puede haber ruptura en donde existe complicidad, y es obvio que NINGÚN Gobernador puede “extraviar” 40 MIL MILLONES DE PESOS provenientes de recursos federales, sin contar por lo menos con el respaldo de un “pez gordo”.
Unos meses después, y ya desde el Reclusorio Norte en la Ciudad de México, el ÚNICO recluso del país que cuenta con las facilidades para montar un SET de TELEVISIÓN para “entrevistas exclusivas” EN SU CELDA, y para mantener comunicación directa con el periodista que se ha convertido, digamos en su “interlocutor” predilecto, declaró: “Te lo voy a decir en buen jarocho: me estoy mordiendo un huevo por no decir todo lo qué decir y el otro, por no mentarle su ma… a Miguel Ángel Yunes”.
Bueno pues al parecer no sólo se le complicó un poco aquello de la “paciencia, prudencia, y verbal CONTINGENCIA”, sino también y MUCHO lo de “morderse un huevo”, porque la misiva que envía a través de su corresponsal predilecto, en la que se refiere a AMLO cómo el SEÑOR López Obrador, y en la que asegura: “Jamás di instrucción alguna para otorgar recursos públicos al partido donde milita el señor López Obrador”, sólo puede interpretarse como una extraña pero profunda, muy profunda alianza entre ambos.
Y tan es así que basta recordar que el primero en defender a Javier Duarte cuándo fue aprehendido, fue justamente el “SEÑOR” – y por favor serenos morenos que el “título” se lo pone, y sólo ellos sabrán por qué, Javier Duarte, no una servidora- López Obrador. El 28 de septiembre del 2016, AMLO durante una gira en Sonora sacó la cara por Javier Duarte y no sólo lo exoneró de toda culpa, también lo convirtió en una pobre víctima… Estas fueron sus palabras: “Están convirtiendo en chivos expiatorios no sólo a BORGE de Quintana Roo, sino a los Duarte de Chihuahua y Veracruz”. http://www.milenio.com/firmas/ricardo_aleman/Duarte_a_prision-AMLO_lo_defiende_18_819698073.htm
¿Es en serio? ¿De verdad hay una o un solo ciudadano de Quintana Roo, de Chihuahua, o de Veracruz que considere a este trío de… tres, cómo unos pobres “chivos expiatorios” casi mártires? No lo creo… Probablemente y concediéndole el beneficio de la duda, tal vez el “SEÑOR” al que defiende Javier Duarte no tenía ni idea de lo que ocurrió en Veracruz en 6 años, o peor aún en DOCE AÑOS, porque tampoco menciona AMLO a Fidel Herrera, pero siendo así ¿cómo con qué calidad moral puede cuestionar cualquier cosa que ocurra hoy en la entidad?
Puede ser que no les falte razón a quienes cuestionan al actual Gobernador por contestarle a un “loco” como él mismo lo describe, pero también es cierto que ese “loco” TODAS las veces que ha recorrido el estado de Veracruz en CAMPAÑA durante la última década, su discurso ha estado basado en criticar con o sin razón – y lo menciono porque de verdad no entendí nunca por qué culpaba a Miguel Ángel Yunes Linares de la barbarie vivida durante todo el Duartismo aun cuando no desempeñaba cargo público alguno y NUNCA al DIRECTAMENTE responsable del brutal saqueo a las arcas estatales y de REGALARLE cada centímetro del territorio veracruzano a grupos delincuenciales- al hoy Gobernador pero JAMÁS a Fidel Herrera o Javier Duarte… Ese mismo Javier Duarte que ahora se refiere a AMLO como: “SEÑOR López Obrador”.
Para serles franca mis estimados lectores, al menos a mí lo que menos me interesaría en el mundo es debatir con alguien que cuándo se le acaban los argumentos COHERENTES responde: “lo que diga me dedito”, pero entiendo la postura del Gobernador porque la conducta de Javier Duarte y Andrés Manuel siguen el mismo patrón… de conducta; Responder tonterías ante temas tan serios como el financiamiento del gobierno Duartista a algunos candidatos de Morena (algunos, tampoco se puede o debe generalizar) en Veracruz, porque de verdad creo que aquella desafortunada declaración de uno de los más fieles y bastante prósperos seguidores de AMLO en la que hacía alusión que a la gente lo que menos le importaba era quien apareciera en la boleta porque TODAS y TODOS sin excepción -o lo que es lo mismo sin raciocinio- votarían por quién el “señor” López indicara, está muy lejos de la realidad.
Hoy las y los ciudadanos no solo tienen a su alcance la información necesaria para contrastar cualquier declaración, discurso político, o nota publicada -por medios que demuestran cada día la indescriptible tirria que le tienen a quién se negó a regalarles MILES DE MILLONES DE PESOS de los veracruzanos para que publicaran mentiras- sino que también tienen la inteligencia suficiente para reconocer lo que cada uno ha hecho bien o mal desde el espacio que ocupa… Y es esto y solo esto lo que definirá el destino de millones de mexicanos.
Y más cuándo resulta tan evidente que la verdadera alianza está entre quien desde Sonora defiende a uno, y quién desde el Reclusorio Norte defiende al otro. PUNTO.
Editorial
